Fernando Baena Vejarano
Si, en este mismo momento, fuéramos plenamente concientes de los colores que nos rodean, de las sensaciones táctiles, gustativas y olfativas, de los sonidos que nos circundan; no podríamos evitar sentir una profunda gratitud hacia la vida: las preocupaciones se irían, se esfumarían como por arte de magia, reemplazadas por el hechizo de estar vivos, de gozar del privilegio de existir. Pero no vemos plenamente sino hasta que pintamos lo visto, no escuchamos plenamente sino hasta que hacemos música, no experimentamos el mundo sino hasta que lo hacemos nuestro por medio del arte.
Creo que el arte tiene todo que ver con el gozo de existir, con la sorpresa y el misterio que nos causa todo lo que nos rodea, con la necesidad de volver a ver, sentir, escuchar, olfatear, palpar, degustar el entorno. No para intentar una representación “objetiva” del mismo, sino para construir nuestro entorno mismo, el entorno de lo propiamente humano, que no puede ser sino este mismo que nos forjamos al darle cauce y significado a ese manojo de experiencias que, solo cuando quedan conformadas culturalmente, podemos llamar “realidad”. La realidad es el producto permanente del arte, que nos posiciona como humanos, en un mundo culturalmente predispuesto, culturalmente inacabado, permanentemente en construcción. Nos hacemos humanos porque reinterpretamos la reinterpretación permanente de lo que nos rodea.
BRIEF DE SITUACIÓN . EMBAJADA DEL ESTADO DE PALESTINA EN COLOMBIA
SECCIÓN DE ASUNTOS POLÍTICOS
El Estado de Israel fue creado de manera artificial por las Naciones Unidas el 29 de noviembre de 1947, mediante la Resolución 181. Si bien la organización apeló al “arraigo histórico, cultural y religioso” que tenían los judíos con Palestina, la realidad era otra. Esta escondía un interés colonial esencialmente británico, impulsado por la banca Rotschild, la cual estaba al frente del Sionismo, luego de la muerte de su fundador, Theodore Hertzl, en 1904.
Precisamente el sionismo era una ideología nacionalista que pretendía originalmente un hogar nacional judío en Europa. La propuesta original buscaba un Estado laico, regido por una constitución y con fronteras definidas, muy diferente a lo que con el tiempo fue Israel. Incluso, en su origen, el sionismo no se basaba en relatos de “pueblos de Dios” ni “tierras prometidas”, y de hecho, era cuestionado por la comunidad de rabinos de Europa.
La materialización de la propuesta del barón de Rotschild no implicó de ninguna manera el establecimiento de un “hogar nacional” judío en Palestina, sino todo un proceso colonial de largo plazo que juntaba intereses británicos con los del sionismo. Este proceso se basó en acciones y postulados de racismo contra la población local, de la cual el sionismo siempre ha negado su existencia. Dicho racismo se materializó en la Nakba -o catástrofe-, consistente en el asesinado y expulsión forzada de cientos de miles de palestinos por parte de agrupaciones terroristas que tenía el sionismo.
El fortalecimiento del proyecto colonial sobre el que se basó Israel, tuvo otro hito en 1967, cuando Israel, luego de atacar a sus vecinos en la Guerra de los 6 días, inició una ocupación militar en Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este. Esta -la más sangrienta de las ocupaciones militares en la historia reciente- continúa hasta nuestros días, arrojando miles de casos de violaciones sistemáticas de los derechos de los palestinos, su asesinato, secuestro, destrucción de propiedades e incluso robo de su memoria. Como manifestación de los crímenes israelíes se encuentra la colonización de Cisjordania, la judeización de Jerusalén, miles de detenciones administrativas, robo de recursos, el establecimiento de un régimen de apartheid y la construcción de un muro que divide el suelo palestino en dos. Así mismo, Israel ha pulverizado a Gaza desde 2008 hasta la fecha en cuatro ocasiones, realizó un hostigamiento diluido entre 2019 y 2020 y un bloqueo desde 2006 por tierra, mar y aire que ha precarizado en extremo las condiciones de vida de los gazatíes.
Tanto Israel como Palestina son Estados en el sistema internacional. Hoy 147 de 193 Estados, reconocen a Palestina como Estado, así como organismos como la ONU, INTERPOL, CPI, FIFA, Comité Olímpico, etc. (a Israel lo reconocen 164). Los territorios de Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este son territorios del Estado Palestino. En cuanto el derecho internacional, Israel viola 91 resoluciones de CS/ONU, así como más de 300 resoluciones de AG/ONU. Tiene un programa nuclear clandestino -basado en el robo nuclear a Francia y el espionaje a EEUU-. No es parte de CPI, ni de los Protocolos adicionales del Convenio de Ginebra, ni Convención sobre la prohibición de desarrollo, producción y almacenamiento de armas toxicas y bacteriológicas, ni Convención sobre la prohibición de armas químicas, ni Convención sobre prohibición de minas antipersonales. Israel ha acusado de antisemita a la ONU y es el único Estado que hace sistemáticamente ataques transfronterizos a sus vecinos.
El descomunal martirio que está infringiendo el ejército de Israel al Pueblo Palestino, deja una angustiante estadística, que clama a la Comunidad Internacional, el apoyo para un cese al fuego inmediato.
Los medios de comunicación internacional, registran con asombro, pero en silencio, declaraciones como las siguientes:
"No transigiré con el pleno control de la seguridad israelí sobre todo el territorio al oeste de Jordania, y esto es contrario a un Estado palestino".
"Estoy orgullosa que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) arrasen la Franja de Gaza”.
"Estoy personalmente orgullosa de las ruinas de Gaza, y de que cada bebé, incluso dentro de 80 años, cuente a sus nietos lo que hicieron los judíos"
"El pueblo palestino no existe".
“No podemos tener a mujeres y niños acercándose al borde (de Gaza). Cualquiera que se acerque deberá recibir una bala”.
“hemos de acribillar a los árabes de Jerusalén”.
“Israel debe apoderarse de Gaza y sus aliados deben aceptar a los refugiados palestinos. Debemos promover la solución para fomentar la inmigración de los residentes de Gaza. Es una solución correcta, justa, moral y humana”.
“La bomba nuclear es una de las posibilidades”.
“El norte de Gaza está más bonito que nunca. Volar y aplastar todo. Es un regalo para los ojos”.
"No hay lugar para la Franja de Gaza. No debería existir el norte de la Franja".
“No hay civiles no involucrados”.
"(los gazaties) pueden ir a Irlanda o a los desiertos, los monstruos de Gaza deberían encontrar una solución por sí mismos".
"Aspiro a que después de la guerra volvamos al establecimiento de asentamientos y vayamos allí con orgullo".
“No creo que haya nadie en Israel que no quiera ver asentamientos judíos en todas partes (Gaza, Jerusalén Este y Cisjordania)”.
“Necesitamos fomentar la migración desde allí. Si hubiera entre 100.000 y 200.000 árabes en la Franja y no dos millones, toda la conversación sobre el día después [de la guerra] sería completamente diferente”.
“He matado a muchos árabes en mi vida, y no hay ningún problema con ello”.
“Haré todo lo que esté en mi mano para impedir un Estado palestino”.
"El juez debe fallar con arreglo a lo alegado y probado por las partes"
José, el mensaje de esta paremia, de origen netamente jurídico, se puede sintetizar en el principio fundamental del debido proceso.
La Constitución Política de Colombia de 1991 se refiere a este de la siguiente forma:
- Artículo 29. El debido proceso se aplicará a toda clase de actuaciones judiciales y administrativas.
- Nadie podrá ser juzgado sino conforme a leyes preexistentes al acto que se le imputa, ante juez o tribunal competente y con observancia de la plenitud de las formas propias de cada juicio.
- En materia penal, la ley permisiva o favorable, aun cuando sea posterior, se aplicará de preferencia a la restrictiva o desfavorable.
- Toda persona se presume inocente mientras no se la haya declarado judicialmente culpable.
- Quien sea sindicado tiene derecho a la defensa y a la asistencia de un abogado escogido por él, o de oficio, durante la investigación y el juzgamiento; a un debido proceso público sin dilaciones injustificadas; a presentar pruebas y a controvertir las que se alleguen en su contra; a impugnar la sentencia condenatoria, y a no ser juzgado dos veces por el mismo hecho.
- Es nula, de pleno derecho, la prueba obtenida con violación del debido proceso".
Vale decir, entonces, que esto nos recuerda que la justicia debe basarse en la evidencia y en el derecho, y que no debe haber lugar para decisiones arbitrarias, caprichosas o injustas.
El filósofo griego de la escuela estoica Epicteto de Frigia dijo:
"Cuando hayas de sentenciar procura olvidar a los litigantes y acordarte sólo de la causa".
En nuestra respetuosa costa Caribe se ve con sorpresa, al igual quizás que en otras partes, cómo poco a poco se le va torciendo el pescuezo a los preceptos constitucionales, que se han convertido en letra muerta; y de esta manera la justicia, más ciega que nunca y con honrosas y reconocidas excepciones, se aparta del espíritu del refrán.
Así, en sus sentencias, prevalece el interés, ya fuese económico, social o político; mientras que bajo la excusa de fallar bajo el imperio de la ley se aprestan a condenar a 5 años, con reclusión intramural, a un humilde ciudadano que se robó una caja de caldo de gallina; al mismo tiempo que los expoliadores de billones del erario se muestran en libertad y sin pudor como los nuevos ricos de la sociedad.
Por cosas como esta, Montesquieu sentenció:
"No hay mayor tiranía que la que se ejerce al amparo de la ley y en nombre de la justicia".
Carlos Crismatt Mouthon
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