Salud

Hundimiento de la reforma tributaria 2024

El archivo de la ley de financiamiento que presentó el Gobierno nacional al Congreso representa una triste victoria transitoria de la ultraderecha, el uribismo, la sinrazón y el sectarismo político. Es una derrota de Colombia y de su pueblo. Se golpea a las empresas nacionales, a las regiones y a los vulnerables, con tal de proteger los intereses económicos de los inversionistas dueños de los juegos de suerte y azar en línea y a las multinacionales explotadoras de carbón.

  

 

 

 Los congresistas que votaron el archivo del proyecto oficial, sin siquiera permitir su lectura ni su discusión, independientemente del partido al cual pertenezcan, deben dar una explicación de su mezquina actitud a la opinión pública y a los colombianos. ¿Por qué archivar un proyecto de ley que disminuye el impuesto de renta a las empresas nacionales de 35% a 27,3%? ¿Cómo votan en contra de la financiación de los subsidios en servicios públicos para los estratos 1, 2 y 3? ¿Cuál es la razón para oponerse a que los saldos adeudados en el servicio de energía por los sectores más pobres, debido a la llamada opción tarifaria, se convierta en deuda pública y la asuma el gobierno nacional? ¿Por qué no adelantar la llamada regla fiscal de 2026 a 2025, lo que permitiría un mayor endeudamiento para inversión? ¿Acaso no es importante eximir del pago del IVA a los proyectos de energías renovables o a los servicios turísticos de los municipios de menos de 200.000 habitantes?

Los congresistas que votaron por el hundimiento de la ley de financiamiento, de mala fe pasan por encima de los gigantescos esfuerzos que ha hecho el gobierno del presidente Petro para cubrir los compromisos económicos que le dejó el gobierno anterior. Se ha cumplido con la regla fiscal, se disminuyó el déficit del Fondo de Estabilización Petrolera, se han cancelado a tiempo las deudas con los organismos de crédito internacionales con sus correspondientes intereses. Nada vale para ellos y con el pretexto político de infringir una derrota al Gobierno del Cambio y al presidente Petro ocultan que se trataba de defender los intereses de los empresarios de los juegos de suerte y azar en línea, a los cuales se gravaba con IVA de 19% en el proyecto de ley. Este negocio mueve alrededor de 42 billones de pesos y al ser gravados con IVA tributarían cerca de 7 billones. Es evidente que el tema de mayores impuestos a la explotación de petróleo y carbón no tiene recibo en un Congreso muy susceptible al lobby de las multinacionales y la ley de financiamiento propuesta incrementaba los impuestos y la sobretasa al carbón.

La tarea de la hora actual es denunciar a quienes votaron el archivo del proyecto, hacer pedagogía sobre el fondo progresivo de la ley de financiamiento, hacer el debate público, rodear al Gobierno Nacional y ratificar como lo expresó el presidente en una dura intervención en Barranquilla: "Hundieron una ley de financiamiento que bajaba las tarifas al pueblo, que estimulaba las energías limpias, que bajaba los impuestos de renta. Traicionaron al empresariado que dicen defender. Maldito el parlamentario que, a través de las leyes, destruye la prosperidad de su propio pueblo. Se lo digo a Char, él y sus parlamentarios, por estar pegados a los negocios particulares, no fueron capaces de dar la batalla".

Yezid García Abello

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